El dinero…..ahhhhh tan controversial ese tema y tan sencillo a la vez.
Lo controversial ha sido causado por ideas humanas desconectadas de la grandeza, ideas con intenciones de control y dominio, ideas que se vienen arrastrando por generaciones de generaciones y que muchas de ellas vos misma quizás sigues cargando.
Piensa esto: el dinero en sí mismo no significa nada, es una pedazo de papel o de metal, el valor del dinero existe a partir de las creencias que le atribuyes y es por eso que es muy común ver que mucha gente vive con mucho dinero y muy probablemente sin tener que lidiar con emociones de culpa, vergüenza, incomodidad o necesidad de explicación.
Bueno, esa gente muy probablemente está en alguno de estos dos escenarios:
- Creció en una familia en donde las creencias limitantes del dinero no existían o
- Hizo un trabajo de re-programación que le permitió desprenderse de todas esas creencias que le habían sido heredadas (éste último es mi caso).
En 2012 empecé a trabajar de forma independiente como consultora empresarial
Fue un inicio muy exitoso y bendecido, tanto que empecé a ganar más dinero del que había ganado nunca antes.
Pero tengo que contarte que una de las cosas que más experimenté fue culpa. Era una incómoda emoción que no permitía disfrutar en paz de aquel dinero que por cierto, no era más que la retribución al gran valor que le estaba aportando a mis clientes, pero a mi mente venían pensamientos como:
No puede ser que yo gane tanto y otras personas tan poco
¿Cómo es posible recibir tanto dinero?
¿Por qué me pagan tanto No creo que mi trabajo sea para tanto…
Me sentía de alguna forma “sucia”, no digna y muy culpable y ni que decir cuando gastaba en algo que a mi juicio no era necesario o era malgastar el dinero…..uffffff, se venía ese huracán de culpa horrible.
¿Qué me salvo a punto de que hoy vivo cada vez más unida con las emociones abundantes y maravillosas del dinero como lo que es, una herramienta de expansión?
Me salvó mi desanestesia, tomar consciencia de que no podía ser normal que yo me tuviera que sentir así y que eso estuviera opacando el mejor momento profesional de mi vida.
Y entonces hice algo que sin duda ha sido uno de los ejercicios más significativos para mí:
Me fui de viaje a Europa con Vic (mi pareja) pero no un viaje cualquiera, un viaje digno de una genia. Un mes completo por Europa, Italia (por todos sus rincones), Grecia, España, a los hoteles más soñados, comiendo y tomando lo que quisiéramos.
Ese viaje te digo fue toda una práctica de re programación, fue una manera 100% vivencial de decirle a mi cerebro: “Que va querido, ya no mandas vos con esas ideas que no me han servido de nada. Ahora soy yo quien decide que creer sobre el dinero“.
A veces en la vida toca dar saltos cuánticos, de esos que te permitan enfrentar a tus creencias como diría yo en terapia de choque y ojo, no te estoy diciendo que tomes decisiones irresponsables pero si te estoy diciendo que hagas el ejercicio:
- Hacer _______ en este momento de tu vida te podría representar esa terapia de choque
- Comprarte _______, eso que siempre has querido pero te atacan los pensamientos limitantes del dinero
- Pasear a _______
- Matricularte en _______
- Remodelar _______
- Regalar _______
No importa si el precio es de $100, $3000, $10,000, eso es lo menos importante, para cada quien su Everest es su Everest.
Te lo dejo de tarea genia porque para reprogramar esas creencias hay que hacer trabajo de consciencia, cambios de pensamientos, escuchar podcast, leer libros etc.
Pero nada nada nada enseña más rápido que la terapia de choque, es decir, hacer eso a lo que tanto miedo le tienes.
Yo después de ese viaje nunca fui la misma. Eso me permitió conectar con un estado de merecimiento que me permitió entender e integrar que yo era absolutamente merecedora de todo y más pero que además quería seguir dándome la buena vida, en todos los sentidos.
Después de ese viaje muchos miedos se pagaron, muchas creencias se re programaron y mucho dinero abundante seguiría llegando a mi vida.
Recuerda, el dinero solo potenciará la persona que ya eres y como sé que eres una genia maravillosa.
Solo serás una genia maravillosa con más expansión para hacer, vivir y compartir toda la abundancia de la cual gozarás.
Estoy ansiosa porque me cuentes cuál fue tu terapia de choque después de leer esto.
Así que anímate y compártemelo, siempre puedes etiquetarme en @adrianafernandezcr.
Necesitamos más historias como las mías y las tuyas para que muchas más mujeres en el mundo puedan vivir a lo grande. No te dejes tus logros para ti, queremos conocerlos.
Bueno mi genia, estoy segura de que te removí al menos un par de conexones neuronales y ya con eso me doy por satisfecha.
Tu re programación sigue en proceso, la genia sigue nutriéndose.
Un besito.
Adri.
